sábado, 1 de diciembre de 2007

Memorias históricas, transiciones y una de patatas bravas.


Dicen que "el pueblo que olvida su pasado está sentenciado a repetirlo", así que un mal drama se cierne sobre las españas. Nuestra democracia de hoy se sustenta sobre la constitución del olvido, la del punto y seguido, la que calla y otorga. Todo lo ocurrido antes de aquel 6 de diciembre de 1978 jamás a ocurrido, todos los abusos de poder y los pecados del mismo han sido borrados del alma de España tras rezar tres padresnuestros y un avemaría. Así que Sadam nunca nos ayudó cuando la crisis de la OPEP en los 70, nunca estuvo aquí hablando con Franco, el príncipe Juan Carlos, como tampoco nos enviaron carne para paliar la hambruna los hermanos argentinos, ni se perdió una bomba nuclear en palomares, ni a los herederos de Franco les ha regalado nadie nada...
Cuando nuestros amigos fachas del PP se empeñan en que no tengamos "Memoria histórica" pretenden que olvide como a mi vecina del sexto, con dieciséis años, fue apaleada por la policía, que olvide el miedo que se vivía en casa, la prohibición de hablar mal de Franco por miedo a que las paredes escucharan. Olvidar como un policía se plantaba en la puerta de tu casa a decir obscenidades que jamás habías escuchado, olvidar como tus padres se mataban a trabajar para vivir en la miseria para ver que esos que ahora te quieren hacer olvidar ya vivían vidas regaladas, olvidar quién es Carmen Martínez Bordíu y, seguramente, aceptar su palabra cuando afirma que nadie le ha regalado nada.
Tanto olvido ya me está produciendo dolor de estómago, pero no recuerdo muy bien por qué me duele. No se si me daña más que esos fachas protejan lo que ilegítimamente han usurpado, o el empeño de los que aprobaron la ley de memoria histórica a medias, sin devolver el honor a las víctimas de un régimen terrorista, sin llamar a las cosas por su nombre... sin recordar verdaderamente que esta tierra fue habitada un día por hombres de verdad.
Me hablan del terrorismo de ETA y me cuentan milongas, pero ETA sólo vierte sangre, posiblemente de inocentes, pero Franco mató mucho más. La dictadura se llevo por delante el espíritu vital de esta patria, la decencia y la honra. La derrota en la guerra mato las libertades, pero la derrota en la dictadura nos mató el alma.
Y hablando de recuerdos y memorias, cuando Juan Carlos I fue coronado, el presidente de la Conferencia Episcopal era Vicente Enrique y Tarancón. Eran tiempos difíciles, pero de ideas claras y sin ambigüedades. Don Enrique era conocido como el obispo rojo (aunque ya era cardenal desde 1969), sobrenombre que le pusieron los reaccionarios de la época.

"(...)en 1971, el 13 de septiembre, Vicente Enrique y Tarancón presidió la autocrítica Asamblea Conjunta de Obispos y Sacerdotes, que concluyó que los pastores de la Iglesia debían ponerse al servicio de la reconciliación de las dos españas y rechazar la diferencia entre vencedores y vencidos de la posguerra, lo que situó al cardenal en el centro de una agria polémica."
ESTE ES UN EXTRACTO DE SU BIOGRAFÍA EN LA WEB QUE EL AYUNTAMIENTO DE BURRIANA LE HA DEDICADO EN EL CENTENARIO DE SU NACIMIENTO (http://www.cardenaltarancon.org/) Es recomendable, para conocer la dimensión personal de este hombre, la Homilia dedicada en la coronación del rey, teniendo en cuenta el momento hitórico que se vivía.

Desde entonces sólo ha pasado el tiempo y las ganas. En aquellos últimos años de franquismo, figuras como Tarancón y otras más anónimas, en el ejército, aunque conocidas como UMD (Unión de Militares para la Democracia), fueron el bálsamo para el cambio. Hay que tener en cuenta que era mucho el aceite que hacía falta, los favorecidos por el sistema, las inercias institucionales, sobre todo en el mismo ejército y las fuerzas de orden público, así como puntales políticos como el presidente Carlos Árias Navarro, eran una fabulosa fuerza de oposición a la democracia. Frente a ellos, comunistas, socialistas y nacionalistas vascos y catalanes podía no tener la paciencia necesaria que el cambio pacífico requería. En aquellos momentos, desde dentro del perverso sistema dictatorial debían aparecer figuras capaces de abrir las puertas necesarias hacia la modernidad, así hoy podemos dar las gracias, por aquel paso, a figuras como Adolfo Suárez, Tarancón, Gutiérrez Mellado, el propio Don Juan Carlos y muchos anónimos individuos conscientes de que aquello no podía seguir así. También es de resaltar las renuncias parciales a sus propósitos, de hombres como Manuel Fraga Iribarne, Tierno Galván, Jordi Pujol, Trias Fargas, Santiago Carrillo, entre otros.
Pero ha llovido mucho desde aquellos esperanzadores días y parece que, lejos de seguir la senda evolutiva tomada por aquellos prohombres, nos hemos plantado en la marginalidad de aquel solitario paso hacia la ambigüedad de una democracia tutelada por la vergonzosa sombra de su pasado. Hoy son más notables los Aznares, Aceves, Raucos y Losantos que los hombres de bien en el camino de un deseable futuro.

sábado, 24 de noviembre de 2007

Escribidores


Existen dos formas de escribir, la primera es hacerlo sobre lo que se conoce bien y la segunda es inventándolo. Cada uno de estos dos tipos de escritura, en la mayoría de las ocasiones, se mezclan para facilitar el acceso al lector. Sin embargo, cada día más, existe un tipo de obras que no deberían dejarse llevar por esta técnica y lo hacen. Ensayos, textos periodísticos, narraciones sobre historia... se dejan seducir por el lado oscuro de la ficción con una finalidad meramente manipuladora.

Recuerdo que mi profesor de noticiarios nos decía que a la hora de reducir una noticia que surgiera de un teletipo debíamos empezar por suprimir los adjetivos. Se suponía que las noticias que llegaban de agencia eran noticias en estado puro y no tenían adjetivos, así que la pregunta estaba servida... ¿Se puede ser imparcial?


Existen dos formas de escribir... la primera es reconociendo tu parcialidad e intentándola compensar de la mejor manera posible y cuestionándote cada palabra mediante un razonamiento eficaz y la segunda, sucumbiendo plenamente a tus instintos básicos de convencer al mundo de que todo es de ese extraño color de tus gafas. Parecerá rastrero, pero si quieres ser periodista, hoy en día, te va a ser muy difícil encontrar reconocimiento y trabajo siguiendo el primer camino, en cuanto al segundo, procura que tus gafas tengan un color similar al de tu editor. Claro, que siempre queda la posibilidad de inventar el entorno de la noticia y poner unos adjetivos mercenarios al servicio del que paga. En cualquier caso, lo que está claro, es que la primera forma de escribir no te va abrir ninguna puerta.


Existen dos formas de escribir... creyéndote lo que escribes o haciéndolo para que lo crean otros.



Existen dos formas de leer: con los ojos abiertos y con los ojos cerrados.

jueves, 22 de noviembre de 2007

Fernando Fernán-Gómez... ¡Adiós, maestro!


Conocí su figura en una época en que nacían los cambios en el espíritu de los ciudadanos, aunque el régimen aún no se hubiera enterado. En aquellos tiempos, él, se limitaba a hacer bien su trabajo. De hecho llevaba años haciéndolo. Llegó a las pantallas de nuestro país como una bocanada de aire fresco. Se le veía actuar cuando todos los actores se limitaban a declamar y, a pesar de ello, su recia voz no se perdía en la desidia. Lejos de ello logró que las voces que le rodeaban aprendieran a imitarle. Para cuando yo nací, el cine español ya apuntaba a un futuro mejor, pero el gran maestro siguió con su magisterio y nunca se diluyó, siguió siendo el gran maestro hasta decir... ¡Adiós!


¡Gracias Fernando Fernán-Gómez! ¡Que bueno que viniste! ¡Que lástima que te marchaste!... ¡Adiós, maestro!

lunes, 19 de noviembre de 2007

La ecología y la moda.



¿Será la ecología una moda?


Hoy nos hablan de reciclaje, de la concienciación ecológica, de la sostenibilidad, del cambio climático… pero, ¿están los gobiernos y las empresas poniendo los medios necesarios? Y, lo que es más controvertido, ¿ponen los medios adecuados para que los ciudadanos lleven a término una vida acorde con esos ideales ecológicos?


Recuerdo que en mi niñez, allá por los años setenta del pasado siglo, todo era mucho más aprovechado. Si bien era una necesidad, existían toda una serie de hábitos que permitían ese aprovechamiento. Cuando mirabas dentro del cubo de la basura, no había casi nada de plástico, en ocasiones ni el propio cubo cuyas paredes y fondo, estaban cubiertas por hojas de papel de periódico y el contenido era, mayoritariamente, residuos orgánicos. En aquellos tiempos bajabas el cubo al portal media hora antes de las diez de la noche y el basurero lo vaciaba en su camión y lo volvía a dejar, vacío, donde lo encontró. Posiblemente fuera lento, pero no menos higiénico que hoy y, seguramente, mucho más “sostenible”. En aquellos tiempos sólo había dos tipos de envases: los de vidrio, que el tendero te abonaba al devolverlos, y las latas de metal, que siempre podían ser separadas del resto de la basura con un electroimán.


Los tiempos empezaron a cambiar un día que, en la escalera, apareció una nota de los basureros pidiendo que se dejaran los cubos sin tapa, con lo que aquello representaba con la existencia de animales callejeros (perros, gatos, ratas…). Una semana después, todos aquellos cubos donde se había olvidado la citada tapa, aparecían sin ella. Aproximadamente un año después, otra nota prohibía bajar los cubos y exigía el uso de bolsas de plástico. De nuevo se dieron una semana de plazo antes de tomar represalias. Esta vez sí devolvían los cubos, pero después de haberlos pasado por debajo de las ruedas del camión.


Por aquellos tiempos, los empleados de servicio municipales, pasaban, pocos días antes de Navidad, pidiendo el aguinaldo y entregándote, por él, una particular tarjeta de felicitación. Aquel año fue hermoso ver como se resolvían las discrepancias. Cuando los representantes del gremio de basureros vinieron en pos de su óbolo tradicional, se les recordaron los desperfectos causados y la onerosidad de sus actos indiscriminados, con la mala suerte que, aquellos empleados municipales, aún pretendieron justificar sus actos en una mala actuación de sus interlocutores. Recuerdo la cacofonía de todas las vecinas de la escalera gritando a un tiempo a aquellos poco previsores individuos, que tuvieron que marchar a toda prisa para no volver, nunca más, a repartir sus felicitaciones navideñas.


La llegada de la bolsa de basura y la veloz y poco delicada actuación de los profesionales de la basura, planteó graves problemas higiénicos. Ya, nunca más, estuvo limpio el rincón de la basura durante las noches. Residuos de bolsas rotas por cogerlas mal o por la acción de animales callejeros, convirtieron aquellos lugares en un lugar de suciedad que, por mucho que se limpiara, siempre desprendía malos olores y quedaban sospechosas manchas.


Pero, como además las bolsas de basura costaban dinero y no era algo que sobrara en los hogares de aquella época, hubo otra consecuencia. Supongo que más de algún cerebro pensante creyó hacer su agosto con las bolsas de basura, pero las amas de casa empezaron a ir a los supermercados, que les daban bolsas para llevar la compra y estas eran luego usadas para tirar la basura. La necesidad de esas bolsas modificó los hábitos de compra. También, por aquellas fechas hubo la primera gran subida inmobiliaria, cambiando a su vez las estructuras familiares, forzando a muchas mujeres a incorporarse de nuevo al mundo laboral. Producto de todas estas circunstancias, tomo fuerza la compra de fin de semana en los primeros hipermercados que hacían de esa compra algo rápido y mucho más lúdico pues intervenía toda la familia. Así, las bolsas de plástico adquirieron mayor protagonismo pues ya se obtenían muchas más de las necesarias y, sin darnos cuenta, se almacenaban en gran cantidad, para, de tanto en tanto, tener que tirarlas.


Pero el cambio sólo había acabado de empezar. Los hipermercados y grandes centros comerciales se fueron comiendo a los mercados tradicionales y los embalajes sobredimensionados al papel encerado.


Pero las administraciones no podían tolerar el uso de bolsas que no fueran de pago para la basura así que primero obligaron a hacerles unos agujeritos en el fondo a todas las bolsas del super para, según ellos, que ningún niño se asfixiase… ¿Es qué no se podían ahogar con una bolsa de basura? Finalmente prohibieron directamente el uso de esas bolsas. Por fortuna alguien diseñó, por aquel entonces, los contenedores de basura y demostró que era mucho más rápida su recogida. Allí murió la última guerra de la basura y, años más tarde, empezaron a aparecer los contenedores de reciclaje…


La nueva “era de la concienciación” pasa por el reciclaje, es decir, ubicar un recipiente para la basura general o sucia, otro papel, otro para vidrio, otro para plásticos y metales, otro para aceites usados… Todo esto en un pisito de treinta metros cuadrados a pagar en cincuenta años y sin que nadie te abone un duro por el esfuerzo. Eso sí, ahora en el super te cobrarán cinco céntimos por cada bolsa agujereada que te den para llevar a casa la compra.


No parece que en todo este proceso las administraciones y las empresas hayan realizado ningún esfuerzo, más bien parece que es el sufrido ciudadano el que, una vez y otra vez, ha llevado todo el peso y trabajo sucio de la evolución social y la revolución ecológica. Un largo proceso en el que, muchos ciudadanos anónimos, han ido dejando trozos de sus capitales y de sus vidas para el beneficio de unos pocos capaces de hacer negocio a lo largo de todas estas modas “ecológico-capitalistas”.


En el pasado, las tiendas te devolvían el importe de los envases de vidrio que se pagaban por separado de su contenido y los que no funcionaban así, como las botellas de cava, siempre era posible venderlos en el trapero, como hacíamos con nuestros residuos de papel, cartón, metal… y así recuperábamos una cierta cantidad de dinero. Hoy es amoral no tirar todo eso en sus respectivos contenedores, bajo unas normas susceptibles de endurecerse a la más mínima y sin ningún tipo de compensación por las molestias. En estas vemos como países como EE.UU. paga hasta 25 centavos por cada lata de refresco que se lleva a reciclar. Nosotros somos más modernos, es el ciudadano de a pie el que cede un espacio de su vivienda para separar los residuos y lo lleva los puntos asignados por nada. El reciclaje nos cuesta tiempo, dinero y, lo que es más necesario hoy día, espacio, pero son las empresas dedicadas al reciclaje y que ya obtienen un cierto beneficio por comercializar el producto que extrae de esas materias primas que todos colaboramos a aportarles gratuitamente, las que obtienen el reconocimiento y subvenciones de todas las administraciones. Si todo fuera bien esto no sería tan grave, pero cuando una de estas, o de otras, empresas decide compartir sus toxinas, ya sea de forma accidental o intencionada, no sólo nos toca sufrir el agravio sin compensación alguna, sino que nos tocará pagar la rehabilitación ecológica del suceso con nuestro dinero.


Hoy voces ecológicas, cual espadas democlianas per se, nos amenazan con sus dedos índices, nos alertan de graves peligros causados por nuestra desidia de hormigas y la voz es premiada por los mismos que obran nuestra tragedia. Entre tanto, los economistas liberales, verdaderos responsables del negro futuro de nuestros hijos, se ríen en nuestras caras y se aprovechan de nuestros esfuerzos escupiéndonos sus maléficos residuos.


Y aquí, sufrientes pecadores, les otorgan “Nóbeles” y “Principes de Asturias” a mogollón, a los unos y a los otros, mientras nosotros nos comemos las ganas de tener voz.


¿Para cuándo un premio a la ciudadanía?


¡Qué tonterías digo! ¿Y quién lo pagaría?

viernes, 9 de noviembre de 2007

Una historia de la calle



El otro día se me acercó una joven con un pañuelo a la cabeza, aunque no era musulmana, ofreciéndome “La Farola”. Me pareció muy extraño porque hace varios años que creía esta publicación desaparecida. Como uno es muy curioso decidí dar un vistazo a aquellos ejemplares. Rápidamente me percaté de que todas las portadas eran diferentes y fechadas, en todos los casos, antes del 2001. Intenté hablarle sobre ese punto a la mujer, pero entonces me percaté de que no sabía hablar ni castellano, ni catalán, ni francés, ni inglés… ¿Por qué no me había dado cuenta hasta entonces?


Quiso hacer me creer que había entendió que le quería comprar todos los ejemplares y me pedía, nada menos, que 60€. Y lo peor es que se había enrocado en ese punto y no podía dejar la conversación pues ella me perseguía levantando la voz cada vez más. Sintiendo una cierta culpabilidad y vergüenza por mi curiosidad, accedía comprarle un ejemplar al precio de 1€ tal y como ponía en la portada, pero ella, erre que erre, insistía e insistía en pedirme los 60€, así que opté por retomar mi camino con cierta celeridad, huyendo de allí. En estas la mujer pasó de las voces a los gritos al tiempo que aparecían dos paisanos suyos, con muy malas pintas y un enorme tamaño. Qué suerte la mía que uno de ellos hablara, mal que bien, el castellano. “Hablando se entiende la gente”, por eso, entre el dialogo y las amenazas nada veladas, llegamos al acuerdo de quedarme con los quince ejemplares al módico precio de 10€.


Marché de allí con aquellos periodicuchos ocupando mis dos manos. Al llegar a una plazoleta me senté en un banco y dejé mi adquisición a mi lado, tomando aire hasta que las piernas dejaron de temblarme. Fue entonces cuando, por el rabillo del ojo, vislumbré a la mujer que parecía andar siguiéndome. Cuando giré la cabeza aún pude verla escondiéndose en un callejón. En ese instante se hizo la luz en mi cabeza sobre toda la trama de aquella estafa. Estaba claro que 10€ no significaban nada para tres personas, por eso la mujer esperaba que yo me deshiciera de aquella “basura” para recuperarla y endosársela a otro despistado en las mismas condiciones que a mí. ¿Cuántos tontos picaríamos cada día?


Como parecían no contar con más ejemplares, decidí complicarles su plan. Me acerqué a un buzón de correos y, una a una, las fui doblando e introduciendo por su boca. Algunas personas me miraron con desaprobación, pero nadie me dijo nada. Así que me marché a buscar el pan para cenar.


Sólo tardé diez minutos en volver a pasar por delante del buzón y vi como la policía se llevaba detenida a la dama y a uno de sus dos “maromos”. Calle abajo se oían gritos, mirar vi como otro guardia perseguía al andoba que faltaba. Por lo que pude ver y oír, los tres habían sido pillados “in fraganti” forzando el buzón de correos y rebuscando en su interior con muy poco respeto por la correspondencia allí almacenada y que, en parte, estaba aún escampada por el suelo.


Por esta vez el truco les había fallado. Por lo visto hay quien no sabe cambiar de hábitos y, cuando algo les funciona, desconocen el momento en que lo han de dejar. ¿Volverán a las andadas cuando salgan a la calle? Estoy convencido de que sí.

sábado, 20 de octubre de 2007

Memoria, dignidad, justicia.



¿Qué ocurre cuando no se condena el terrorismo? ¿Qué se supone que se acepta ese terrorismo?, ¿qué aunque uno no esté de acuerdo con la violencia cree que a los terroristas no les faltan razones?


Personalmente no lo sé. Siempre he creído que el uso de la violencia le quita la razón a quien la usa. Sin embargo, sorprendentemente, el señor Mayor Oreja podría aclararnos todas esas dudas ya que, lejos de condenar el régimen terrorista de Franco, se atrevió a decir que la situación durante el franquismo era de "extraordinaria placidez". Eso es algo que a mí me sorprendió mucho porque en mi casa, que estábamos muy alejados de cualquier tipo de política, se vivía un clima de continuo temor y jamás me atrevería a denominar aquella época como placida. Claro que yo, por aquel entonces era un niño con ojos y sentimientos, tal vez eso me diferenciara de tan eminente político. Pero me da en la nariz que no van por ahí los tiros porque aún añadió "si muchas familias lo vivieron con naturalidad y tranquilidad". No me atrevo a imaginar que familias serían esas, me recuerda aquel chiste donde un personaje similar al que nos ocupa le suelta a un españolito de a pie: “con Franco vivíamos mejor… que usted”. Me imagino que diría el eurodiputado don Jaime si un aberzale de esos a los que tanto a perseguido, le dijera que hay muchas familias en el país vasco que viven el terrorismo de ETA con total normalidad, no creo que obrara con el mismo rasero, de hecho nadie en su partido a sido capaz nunca de esa igualdad. Si alguien esperaba que alguno de sus compañeros de partido llamara la atención al político vasco, también se habrá quedado con un palmo narices. Cuando el señor Acebes, lejos de condenar y recriminar tamaña obscenidad, se limitaba a hacer una cómica (todos es cómico en este individuo, salvo sus aviesas intenciones) interpretación de aquellas palabras.


Pero en el discurso de Mayor Oreja aún hubo más, se atrevió a decir que en la dictadura, como en la guerra, también hubo dos bandos. Está claro que en el PP nunca aceptarán, si no se les obliga, que un lado era el de los asesinos, los gusanos vividores, el del dictador, el que mataba y el otro era el yunque patrio, el que recibía todos los golpes, el que daba su sangre, el que trabajaba para sobrevivir mientras le primero le aterrorizaba y le arrebataba hasta el sueño de su cabeza.


¡Ya basta! ¿Para cuando la aplicación de la ley de partidos al PP? ¿Dónde está la diferencia entre Herri Batasuna y los populares? ¿En los jueces?


Que se lo hagan mirar que España se rompe… por la oreja.

sábado, 6 de octubre de 2007

Hamilton 007 con licencia para traicionar.



Los mentideros de la Formula 1, en los últimos meses están dando mucho de sí, pero la última noticia, que espero no se pueda confirmar nunca, porque significaría la desaparición de este increíble… ¿deporte?


Al parecer cuando Eclestone se reunió con Camps (el presidente de la Generalitat de Valencia) para negociar un segundo gran premio en España para la capital su comunidad autónoma, había una contrapartida. Al parecer el jefe de la Formula 1 creía que los pilotos españoles, con tantas carreras en su territorio iban a tener ventaja, por otra parte, la organización y los beneficios que han demostrado las carreras en nuestro país, eran un filón que no se podía dejar sin explotar. Esto no es nuevo, pero lo que sí lo es estaría relacionado con cierto piloto valenciano. Por lo visto Ecclestone podía haber pactado con Camps que hiciera lo posible para que Adrián Vallés no obtuviera la financiación y se pusiera al volante de un F1. En las negociaciones no parecían estar incluidos ni De La Rosa, ni Alonso, ni Gené, pero ahora corre el rumor de que ese tema ya lo tenía atado de antes y le hubiera salido redondo de no ser por los imprevisibles Alonso y Briatore que puede haberle echado un capote al asturiano a pesar de su marcha a McLaren.


Mientras recogía esta información se han sucedido la carrera de Japón, las reclamaciones Webber y Vettel por las irregularidades de Hamilton, la primera desestimación, la aparición del video, la nueva desestimación… y todo ello cuando por mucho menos y sin provocar ningún accidente, como es el caso, se había realizado una advertencia a Alonso. Ecclestone hace muchos años que pretende que un piloto inglés sea campeón del mundo, con Button las cosas no le salieron bien, ahora, con la colaboración de Ron Dennis ha encontrado en Hamilton un candidato perfecto.


Hemos escuchado por boca de varios comisarios de carrera que la acción de Hamilton merecía un castigo ejemplar, sin embargo el inglés ha salido de rositas. Finalmente, tras visible mal comportamiento del McLaren de Alonso muy sospechoso, este piloto ha terminado por hablar y contarnos lo que ya suponíamos. Como será realmente la situación de mobbing que el piloto sufre desde febrero que ha hablado del tema con pilotos con los que apenas lo hacía. Lástima no lo hubiera hecho antes, se hubiera ahorrado este disgusto, pero Alonso siempre fue admirador de Ayrton Senna que corría en esta escudería y mientras otros pilotos tenían su sueño en Ferrari, Fernando soñaba en una escudería que ni siquiera era ganadora hasta contar con él, pero eso es algo que nunca le reconocerán. Curioso que esto sea así cuando la competitividad de este coche se debe al trabajo de Fernando con los ingenieros de McLaren, unos ingenieros que no fueron capaces de hacer competitivo a este coche durante la temporada anterior que no ganó ninguna carrera a pesar de contar con Raikkonen como piloto.


Dennis y Ecclestone saben que este año debe ser campeón Hamilton porque si no ya no lo será nunca. El piloto tiene la cualidad de ser inglés y poner toda la carne en el asador en la pista, pero ahí se acaban sus virtudes, es un vulgar come-pistas capaz de pilotar lo que le echen, pero incapaz de conocer lo que tiene entre manos para adaptarlo a la pista. Hamilton no tiene las aptitudes de Kovalainen, pero este último no ha contado con un piloto como Alonso que hiciera de su coche el mejor del mundial. No contento con esto, en el GP de Hungría denunció a Alonso en Hungría por algo que pudo ser fortuito, pero en cualquier caso el piloto inglés nunca dudó en mostrar su deshonestidad contra el piloto español. Últimamente Ron Dennis, que si Hamilton no tuviera a su papa chupando cámara a todas horas, sería su papá deportivo, no ha dudado en soltar todo tipo de falsedades obvias que comprometan al bicampeón del mundo.


Hay otro tema grave en toda esta historia, el supuesto caso de espionaje de McLaren sobre Ferrari. Todo el caso se sustentaba por unas hojas encontradas en una fotocopiadora, pero en el mes de mayo llegan unos e-mails a los correos de Alonso y De La Rosa. Unos e-mails que, o bien lo recibieron todos los pilotos, Hamilton también, o bien querían implicar a ambos españoles. Si unimos esto a lo de Adrián Vallés hay alguien muy interesado en que no haya pilotos españoles en el mundial. Sin embargo el mobbing a Alonso era tan grande que el piloto español decidió que no se la podía jugar, los e-mails, que a saber de dónde habían salido, junto a la evidencia de la fotocopiadora acababan con McLaren perdiendo todos sus puntos en el mundial, sin embargo Hamilton, que indudablemente se había negado a colaborar con la FIA, es tratado como el propio Alonso. Nuevamente Ecclestone tiene muy claras sus preferencias.


Está claro que Hamilton no merece este mundial, pero si no ocurre algo que a “Il Cappo”, como se conoce a Ecclestone, no le pille por sorpresa, el piloto inglés conseguirá su sueño y el de sus dos compatriotas confabulados.


Está claro que a Alonso no se le ha tratado en función de su categoría, eso es algo que no pasa desapercibido ni al más imbécil, por muchas declaraciones absurdas que pueda realizar Niki Lauda, posible sucesor de Ecclestone al frente de la F1. Pero hay que decir que Fernando Alonso ha hecho muy fácil esta actuación contra él con su mala fama de antipático y algunas actitudes realmente infantiles. Así los ingleses, haciendo piña, le han robado lo que por derecho le pertenece, sin embargo… ¿qué va a pasar ahora?


Si Alonso se queda en McLaren ya no colaborará con la escudería de la misma manera, porque sabe que no le van a permitir ser campeón del mundo. Pero McLaren no puede permitir que se vaya ni a Renault y menos a Ferrari porque los haría campeones del mundo. Tal vez la solución sería que marchara a Toyota u Honda que ya se frotan las manos, pero quién correría con Hamilton, porque ningún piloto con aspiraciones aceptaría tenerlo de compañero, por otro lado el inglés es un peón inútil si no le acompaña un piloto de verdad para que el McLaren funcione. Dicen los mentideros que ya se habla de David Coulthard que tiene una gran experiencia como piloto preparador de coches y, además, no es un gran piloto en pista… y lo que es más importante: es británico.


Quedan dos carreras pero ya podemos dar por hecho que Hamilton es campeón del mundo, que eso es algo que hace muchas carreras que se decidió… de hecho pudo ser antes del mundial, en un despacho de Valencia donde Camps le dio la mano a Eccleston sin saber que había vendido su alma al diablo… y España entera a la fórmula uno.


Hamilton primero “el come-pistas” rey de la fórmula uno. Hamilton 007 con licencia para traicionar al bicampeón del mundo. Y ahora que venga la prensa inglesa a seguir dando patadas al mejor piloto del mundo (desde la retirada de Schumacher nadie puede rebatirle ese título l piloto español) y, de paso, a la aún celosa prensa alemana, que ha asumido peor que su piloto retirado, los dos campeonatos de Fernando Alonso.

martes, 12 de junio de 2007

Como moscas a la mierda.


Los publicistas acostumbran a jugar con el exhibicionismo y la gente es incapaz de percatarse de como son manipulados. Sepan que los objetivos principales de un anuncio son llamar la atención y hacer que la marca anunciante se grabe en el cerebro de la gente y si, esto último, se puede hacer de la forma más sutil posible, tanto mejor.Pero llamar la atención implica más cosas. Cuando atraes la mirada del mundo sobre algo, ese algo se convierte en objeto de deseo y en objeto de desprecio, pero no un desprecio de ignorancia, sino un desprecio activo, un desprecio que no dudará en actuar de forma dañina.Ese exhibicionismo también está patente en los escritores, que aunque lo nieguen, también son verdaderos publicistas. Todos hemos podido ver en televisión a Sánchez Dragó con su premeditado aburrimiento que cambia repentinamente cada vez que habla de una de sus obras, quién se ha olvidado de don Camilo José Cela y sus conversaciones sobre pedos y enemas o de Francisco Umbral, dispuesto a montar un Dios es Cristo porque había venido a “hablar de su libro”. No se engañen, ser escritor necesita de algo más que una técnica, imaginación e incluso, un padrino. Quien de verdad desee ser un gran escritor debe empezar a preparar su campaña publicitaria, pero debe ser mejor aún, en esta faceta, que escribiendo, porque en la actualidad hay tanta publicidad por todas partes que llamar la atención, sin crear enemistad, es muy difícil. Tal vez, por esto muchos acuden a aquello de “que hablen de mí aunque sea mal”. Pero se equivocan, si quieres ser el autor de algo que verdaderamente se venda y perdure, no puedes dejar que los malos sentimientos del publico sean tu carta de presentación. Por otra parte, las fórmulas para llamar la atención de forma negativa son tan agresivas y contundentes que tapan la publicidad, más benigna, de los demás, de este modo, cuando un lugar se satura de publicidad negativa, las obras de verdadero valor pasan desapercibidas. Esto, por desgracia, es lo que ha sucedido en Tus Relatos los dos últimos meses.Bien... ya habéis leído el título de este ensayo: “Como moscas a la mierda”. Con este título solo repudia se puede cosechar, pero como es una repudia activa has entrado a mirar esperando leer una obra rupturista y luego te has encontrado con esto. Primero has pensado que era moralista, si no has dejado de leer antes, habrás pensado que era aburrido, pero si has llegado hasta aquí es que eres de los que te ha picado la curiosidad... “¿Qué se le habrá ocurrido?”, has llegado a pensar...NADA DE NADA.Explicar lo que es evidente puede resultar un flojo equipaje par tan llamativas maletas, pero hacerte pensar sobre ello, al margen de este texto, podría ser un logro excelente para mí.No sé si te has enfadado conmigo por esto, en las valoraciones lo comprobaré, pero puedes estar seguro que, con tan bonito título, el número de lecturas subirá como la espuma... acudirán como moscas a la mierda.Antes de despedirme les pido disculpas si se han sentido ofendidos, pero no tenía una forma mejor de llamar su atención y evidenciar lo que eso significa.

lunes, 28 de mayo de 2007

11


Sí, 11. Ese es el título del libro que muy pronto podrá adquirirse en las librerías. 11 autores y 11 historias. 11 relatos sobre el ser humano, la vida, la muerte, la casualidad... desde las historias de fantasía y ciencia ficción al más puro triller psicológico.

11.

domingo, 29 de abril de 2007

El valle de los sueños.


Confusa está la noche en piruetas con las luces de la carretera y las nieblas del río. La luna juega al escondite con la bruma y el olvidado castillo se divierte en silencio, escuchando, tal vez, como el agua se escurre entre las redondeadas piedras y el tímido rumor de hojas que, como fricción de aves a la huida con sordina, llega desde la alameda.
No hay nada más. Ninguna otra cosa se escucha y sólo, muy de tarde en tarde, el sordo ronquido de un coche, se atreve a despertar la magia que nos envuelve.
No es verano y no es invierno. El tiempo no existe en el valle. La noche es bella y el día es hermoso. El frío no hiela y el calor se envuelve de vida. El aire, sin vicios ocultos, nos brinda una eterna primavera en los corazones y únicamente dos detalles nos recuerda que somos gentes de este mundo que se ha empeñado en apretar el gatillo dentro de su propia boca: el castillo que nos une a la alejada historia y la carretera, nuestro cordón umbilical que nos ata a la placenta de una madre muerta.
No sobemos cuánto tardará en sucumbir nuestro sueño. Ya nos han amenazado varios constructores con la invasión de sus sucios ladrillos. Sólo queremos vivir en paz, pero sólo es cuestión de tiempo, hasta que alguno de los nativos se deje seducir por el color del dinero. Un dinero que no servirá para pagar el sepelio de nuestro futuro ni el de nuestros hijos.
Al este, el filo de las montañas apunta un nuevo brillo. Y las montañas, ansiosas por mirar hacia aquí, una vez más, se prestan a abrir paso a esa nueva luz: amanece. Y hoy aún es hoy. Quiero respirar la humedad del bosque, el frío de las montañas. Quiero sentir el zumbido de los mosquitos, el trino de las golondrinas… y recordar el aullido de unos lobos que ya no están.
No quiero dormir mientras aquí quede una gota de vida. Quiero vivir este sueño despierto porque, tal vez si me duermo, al despertar descubra un paraíso muerto donde los rebecos ya no bajen a beber al río y no exista un águila que alimente a sus crías. Si me duermo ya no podré soñar nunca más.

domingo, 25 de febrero de 2007

Para la libertad...


"Para la libertad... sangro, lucho, pervivo..." este es uno de los pasajes de la canción de J.M.Serrat perteneciente al álbum a Miguel Hernández. El ilustre poeta alicantino murió como consecuencia de las penurias de su presidio. Un presidio, cuando no era la muerte, que esperaba a todas las almas libres que no pudieron exiliarse antes de acabar la guerra. Hernández, como muchos otros, fue un hombre de paz, pero de nada le sirvió, tan solo para alargar su agonía detrás de los barrotes del penal de Alicante.


"En Orihuela, su pueblo y el mío, se me ha muerto lo que más quería..."


Él lloró, como todos, la muerte de sus amigos, pero tras el conflicto bélico, también tuvo que llorarle a la vida misma, leyendo las cartas que, su esposa, le enviaba. Con ellas vivió, en la lejanía, la infancia triste de su hijo al que dedicó el desgarrador poema "las nanas de la cebolla", también convertido en canción por J.M. Serrat en el mismo álbum.


Muchos fueron los que vivieron el terror del franquismo, en especial ese periodo, de 1939 a 1950, conocido como posguerra. En aquellos años, y en los siguientes, quedó prohibida toda manifestación en contra de los execrables actos terroristas ejercidos desde el poder y uno podía ser acusado y condenado por el mero hecho de dolerse de tanto desamparo. A Miguel Hernández le tocó sufrirlo en aquella época y, años después, en la época que le toco vivir, también J.M. Serrat tuvo que llegar a exiliarse para evitar problemas durante los últimos coletazos de la dictadura. Una dictadura que, aunque menos dura, nunca perdió el control, ni tan siquiera cuando el dictador murió, tampoco cuando se aceptó la nueva Constitución...


¿A qué viene todo esto?


En los últimos tiempos, sobre todo desde 2004, hemos vivido de convulsión en convulsión. Si ETA nació en pleno franquismo y fue cambiando de personalidad hasta nuestros días, la democracia también ha sufrido sus cambios. Desde su nacimiento, allá por el 1978,se han intentado ir incorporando mejoras para hacer de España más moderno e intentarlo alejar del infierno facisto-católico del franquismo, pero, como en la República, llegó nuestro bienio negro, que en nuestro caso duró ocho años. Estos nuevos "conservadores católicos" se pusieron otra etiqueta "liberales de centro", pero al fial resultaron neo-liberales y, salvo la abolición del servicio militar obligatorio, dierón un terrorífico paso atrás en la democracia aun mal definida.


Un atentado, sospechosamente fallido de ETA, a la persona de J.M. Aznar, fue el desencadenante que llevó a este, poco capacitado, político, hasta la presidencia del gobierno. Cuatro años de pactos, donde aún se pueden encontrar acciones de gobierno aceptables, y en el año 2000, tras vencer en las elecciones por mayoría absoluta, Aznar y la cúpula del PP se quitaron la mascara.


A partir de aquel día el mundo empezó a girar más deprisa, se instauró una política de revancha, en especial contra el País Vasco y Catalunya. Se bloquearon todos los procesos de aperturismo a Europa y se desviaron todos los fondos nacionales hacia un proyecto centralista, desvinculando de Madrid, únicamente, aquello que supusiera un gasto excesivo para el estado central, como la atención sanitaria, pero sin retornar las deudas que el gobierno central había contraído con las comunidades autónomas en ese ámbito... es decir, se cargó la seguridad social y sólo la habilidad financiera de las diferentes comunidades autónomas evitó su fin.


El 11 de Septiembre de 2001, el mundo sufrió un empujón adicional, luego llegó la guerra de Afganistán, que por culpa de la falta de previsión del presidente norteamericano, Bush, aún es una sangría de vidas, porque, aún no terminado el proyecto afgano, e instigado por el lobby judío, se metió en el lío iraquí. Y, adivinen quien se metió de cuatro patas en ese mogollón.


Los españoles nos convertimos en un símbolo contra la guerra con manifestaciones multitudinarias por todo el país, pero eso no fue óbice para que el terrorismo islámico atentara el 11M, tres días antes de una elecciones generales. En aquellos días, el ejecutivo del PP, acostumbrado a mentir sin compasión, intentó sacar partido de aquella sangre de inocentes culpando a su archienemiga ETA, la que con otro atentado le dio el poder. Pero para muchos aquello no llevaba la firma de ETA al vez, Aznar, Acebes y compañía pensaron que en tres días no habría tiempo para descubrir el engaño. Sin embargo, la policía española trabajo bien y deprisa y no estaba dispuesta a perder de un plumazo el prestigio que había tardado muchos años en ganar, así que intentaron llevar a todos los líderes políticos sus verdaderas investigaciones, al rey, a Maragall, a Zapatero, a Fraga... incluso a Carod-Rovira. Entre tanto, la prensa y los servicios diplomáticos eran obligados a beber de la fuente del ejecutivo... "hay dos lineas de investigación y una apunta a ETA..." estas seguían siendo las palabras de Acebes, cuando el pastel ya estaba descubierto. La sospecha se convirtió en certidumbre y los medios de comunicación, aquel sábado que debía ser jornada de reflexión, se volcaron en destapar la infamia. Desde la noche anterior, muchos españoles se plantaron, ante las sedes del partido popular, pidiendo explicaciones; a la mayoría no los tuvo que llamar nadie, pero algunos fueron avisados por SMS's de toda índole... la gente estaba enfurecida. Y aquello se acabó, al día siguiente en las urnas. O debió acabarse, porque este grupo no ha ncajado la derrota, y como ya sucediera en la República, tras el bienio negro, las fuerzas de la ultraderecha se han unido, sin mirar en gastos, para volver a incendiar el país, volver a matar a España.


Oposición sin sentido todo lo que haga el actual gobierno, incitar a todos los pueblos de España unos contra otros. Ataques reiterados a Catalunya y Euskal Herria. Y el colmo a sido el de bloquear al ejecutivo cuando ETA hizo ademán de querer llegar a la paz. Por si esto fuera poco, la doble moral del grupo terrorista, algo más que comparte con los aznaristas, ha servido de excusa para iniciar otra campaña para dañar al país en la figura del gobierno. En este flanco, la AVT, dirigida por el Sr. Alcaraz es su adláter.


En las últimas manifestaciones que han intentado disimular que eran contra el terrorismo, mostrando banderas franquistas y gritos fascistas. Han tenido la mala voluntad de ensuciar alguna bandera republicana (la española democrática ya hace tiempo que no soporta su olor) e incluso, para dañar más la realidad han dañado la palabra libertad y cantado la canción del principio... eso sí, sin permiso del poeta ni del autor.



"Para la libertad... engaño, mato y martirizo", porque la libertad es sólo para mí y mi bolsillo...

domingo, 18 de febrero de 2007

Escándalo en Mestalla

La foto no pertenece al partido de Mestalla, donde el público supo comportarse mejor de lo que algunos individuos, ajenos al mundo futbolístico, pretendieron.


La liga de las estrellas ha estado salpicada en muchas ocasiones por la política, pero la de hoy en Mestalla debería obligar a una investigación y una sanción ejemplar ya que se pretendió, con esa actuación, un beneficio económico y político haciendo uso de la obvia mentira y la falsificación.
Si el caso Oleguer no había calentado bastante los ánimos cuando determinados medios de prensa, que avergüenzan a la profesión, habían realizado una interpretación falsa y malintencionada para dañar la imagen de una persona, el jugador Oleguer Presas, que siempre razona sobre temas conflictivos sin temor y metiendo el dedo en la llaga, ahora los mercantilistas de Kelme y algunos miembros del partido popular valenciano han protagonizado un nuevo acto.
No nos cabe duda que el calentamiento previo al partido, de normal, ya hubiera sido suficiente para que silbaran al jugador, pero la cosa podía haber sido peligrosa cuando, algún allegado a la empresa valenciana, rescatada con fondos públicos por el gobierno autónomo del PP, le ha devuelto el favor a este partido de la ultraderecha imprimiendo octavillas y entregándolas a la entrada del campo para enardecer los ánimos. Siendo estrictos con la ley, esa acción constituye un delito de incitación a la violencia, más aún en un lugar tan sensible como son los campos de fútbol. Recordemos los sucesos de las pasadas semanas en Italia.
Por su parte, el jugador Salva Ballesta, que ya nos había deleitado con sus “banderoladas” franquistas, la pasada semana insultó al jugador catalán de forma grosera, también ha sido pitado en Riazor por una parte del público... claro que un aficionado nos comentaba que se debía a cuestiones más relacionadas por el fútbol.
Silbarán también a Capelo por sus palabras de apoyo al franquismo el pasado mes de mayo y que, las malas lenguas, afirman que es la razón de que hoy sea el entrenador del Real Madrid y de que aún se le toleren más fallos.
Todo jugador, como persona que es, tiene libertad para opinar y manifestarse políticamente como le plazca, pero unos y otros deben tener el fútbol separado de la política. Cuando el jugador se enfunda las botas forma parte de su equipo de once y el público que no entienda esta dicotomía persona-jugador no debe ser admitido en un campo de fútbol.
El escándalo de Mestalla, esta vez, no tiene que ver con el árbitro, ni con las expulsiones, sino con la actitud política de algunos elementos externos y que, de tolerarse, amenazan más al fútbol que los posibles errores arbitrales.

domingo, 4 de febrero de 2007

Milton Friedman y el neoliberalismo.


Hoy vamos a recordar la figura de una persona que nos dejó recientemente: Milton Friedman. No quiero engañar a nadie, yo no soy ese tipo de personas que piensan que debe hablar bien de alguien por el simple hecho de habernos abandonado. Lo único bueno que se puede decir de este señor es que ganó el premio Nobel de economía en 1976, pero creo que esto habla peor de este premio que bien del personaje, claro que eso, contado así, no es más que una mera opinión.
Hablar de Friedman es hablar de la “escuela de Chicago” ya que él fue su máximo exponente y sus teorías económicas guiaron a gobiernos como el de Richard Milhous Nixon, Margaret Thatcher, Ronald Reagan y Augusto Pinochet, que bajo sus auspicios borraron todo rastro de política económica keinesiana. En pocas palabras, Milton Friedman es el padre del neoliberalismo económico que promulga la diferenciación social entre los sometidos a las multinacionales y un mundo paria que no merece ningún respeto. Por supuesto que esto no se formula así en sus teorías. Friedman, y en general la escuela de Chicago, retorna a las ideas esenciales de Adam Smith, sin embargo, la teoría de la mano invisible se fue desmoronando conforme evolucionó la globalización. Tarde, muy tarde se descubrió la máxima de que “la riqueza ni se crea ni se destruye, sólo cambia de manos”. Cuando no teníamos un conocimiento global los mercados se autorregulaban y compensaban solos, pero ahora vemos que para producirse esa regulación debe crearse un nuevo flujo de recursos mercantiles desde otro lugar que descompensan en origen y a su vez se regula con recursos de otro lado, etcétera. Los flujos de compensación se globalizan, pero cuando en un punto se concentran varios flujos de compensación, se produce una crisis, esta crisis impide que los recursos de compensación fluyan de la forma necesaria y eso extiende la crisis de mercado en mercado buscando una mano invisible que los compense y si esa mano no llega aparece una crisis global. El mejor ejemplo de este tipo de crisis fue la de los “tigres asiáticos” y en el fondo de esta crisis el error de la escuela de Chicago.
La teoría neoliberal no es una teoría real, lo cierto es que no es más que una burda excusa para que las grandes empresas puedan seguir sus formulas fagocitarias de mercados. El neoliberalismo se resume en una frase: “lo que es bueno para la empresa es bueno para todo”. Creo que la palabra Irak ya lo dice todo. Pero el neoliberalismo olvida también la parte más trabajada del discurso de Adam Smith cuando intenta definir en que consiste la mano invisible. Según Smith la mano invisible es producto del egoísmo de los mercados, no dejaba de fascinarle como una ciudad como París (enorme ya en aquella época) se autoabastecía con productos que, en ocasiones, venían desde muy lejos. Smith explicaba como algunos comerciantes eran capaces de traer los recursos desde muy lejos en busca de su beneficio económico… París era el mercado. Pero en la actualidad quien comercia son las grandes empresas y el egoísmo no está en ese ser jurídico e impersonal, sino en sus ejecutivos y accionistas. Ahora el mercado ya no se abastece de lo que este necesita sino que el comprador debe aceptar lo que a las empresas les produzca mayor beneficio. Cualquiera puede decir que los mercados tienen más variedad de productos de los que ha habido nunca, pero si nos fijamos esto es una falacia, lo que realmente tenemos es una enorme variedad de productos elaborados con un número de productos muy reducido y ,entre tanto, gran variedad de productos base están desapareciendo. Un ejemplo claro: hace cien años se producían cerca de diez mil vegetales comestibles, en la actualidad a duras penas llegamos a trescientos.
Así pues, en la sociedad empresarial de hoy día, los movimientos económicos se mueven bajo los dictámenes del egoísmo de directivos y accionistas. Pero podemos eliminar a los accionistas ya que el pequeño accionista no cuenta, solo cuentan los grandes que a su vez vuelven a ser empresas y, por tanto, dominadas por otros ejecutivos. Esto convierte a esos ejecutivos en los seres más poderosos del mundo, sin embargo, eluden las responsabilidades que ese poder implica. En los años setenta, el neoliberalismo paternizó a unas multinacionales verdaderamente poderosas e irresponsables y el mundo cambió hasta que la crisis del petróleo le puso freno. Para sobrevivir (la empresa era la única importante) las empresas de la época despidieron empleados a manta… solo una gran empresa japonesa de ámbito tradicional plantó cara a esa tendencia: Toyota. Toyota mantuvo a sus empleados a pesar de perder casi todo su mercado, cosa que tiene merito especial porque la automoción fue uno de los mercados más afectados. Cuando a finales de esa década la OPEP accedió a aumentar la producción, las empresas de automoción tardaron en recuperar su ritmos de producción, salvo Toyota, que en nueve meses paso del quinto al primer lugar entre las empresas japonesas de automoción y del dieciocho al tercero en el mundo, fue entonces cuando accedió a fabricar vehículos Honda en sus factorías, salvando a esta compañía que, poco tiempo después, inició su expansión por todo el mundo.
Pero si hablamos del triunfo de una empresa no neoliberal también podemos hablar del fracaso de grandes empresas neoliberales en el sentido puro y duro: ENRON y Pan-Am.
Pero no todo en Milton Friedman fue neoliberalismo. Partiendo de su crítica a Keynes explicó los efectos inflacionistas de la sociedad del bienestar, sin embargo, en lugar de intentar compensarlos, prefirió atacar directamente al estado del bienestar preconizado la ley de la oferta y la demanda libre. Fruto de esta teoría Gran Bretaña desmontó su sistema de seguridad social por otro más parecido al norteamericano en manos privadas. Originalmente los británicos salieron beneficiados con el cambio al eliminar las corruptelas funcionariales, pero en la actualidad, años después, sufren la eliminación paulatina de servicios para mantener el beneficio que la empresa privada exige.
Friedman también actualizó la teoría cuantitativa de la moneda y defendió un sistema socialista de impuestos donde el que mas ganaba debía aportar mayor porcentaje a las arcas del Estado para pagar un sistema social, esto es algo que el nuevo neoliberalismo más salvaje no ha seguido y es algo que él denunció, porque su máxima aportación a la economía fue la aportación de ideas y teoría para salvar las crisis económicas y ya hemos visto como la espiral egoísta es la fuente principal de estas crisis.
Pronto sabremos si su muerte abre la puerta a un neoliberalismo más salvaje o el retorno a las economías sociales. Porque Milton Friedman, a pesar de su avanzada edad, era escuchado por todos los líderes de la economía mundial y su desaparición traerá cambios en las políticas económicas de las naciones más poderosas así como en la OMC, el FMI y el BM.




APÉNDICE


Aunque algunas personas con poder pretendan, desde hace mucho, hacernos creer que la libertad económica es algo bueno, eso es una falacia. Como también es un engaño el término liberal en Europa. Véase la matización, dado que en el viejo continente y en el nuevo no significa lo mismo. Mientras en Europa es la tendencia económica que promueve la liberación de los mercados, en América se refiere a las personas de mentalidad abierta, por lo que siendo poco estrictos, podríamos decir que son definiciones antagónicas. En Europa, ese liberalismo sería algo similar al libertarismo, pero sin sus matices anarquistas. Esa es la razón de utilizar el término neoliberalismo acuñado, creo, por Georges Soros. La libertad de mercados implica la libertad para establecer monopolios y la libertad para que el que tiene más dinero imponga sus normas, por eso los mercados deben estar regulados. De hecho existen muchos grados de liberalismo, pues bien, la escuela de Chicago estaría con aquellos más alejados de las ideas de Keynes y de Galbraith. Esta escuela ha dominado la economía mundial desde finales de los sesenta, pero a raíz de la crisis de los tigres asiáticos y el fracaso de su aplicación en Argentina, se ha iniciado un proceso de crisis. En trabajos recientes se ha demostrado que muchos de los trabajos de esta escuela y en especial de Friedman estaban realizados en un proceso inverso, es decir, primero se ideaba lo que se quería hacer y luego se creaba un estudio en el que se demostraba la validez de esa acciones, si algo fallaba después, siempre se podía culpar a factores externos. Eso pudo servir para Rusia y Argentina como explicación, pero cuando China se negó a seguir los consejos del FMI y contrato a sus propios economistas (la mayoría keynesianos) y salió fortalecida de la gran crisis asiática, el castillo de naipes neoliberal se vino abajo. En nuestro país hay grandes seguidores de Friedman, a pesar de las evidencias, pero además tienen un poder político y sobre los medios de comunicación tan grande como para censurar las teorías que no les son afines. De hecho en España existen grandes economistas de raíces socialdemócratas pero que tienen verdaderos problemas para publicar sus trabajos, mientras entidades como FAES publican los trabajos, incluso inacabados o probadamente erróneos, de “economistas” neoliberales. Respecto a los parias… quien ha visto un paria gobernando una empresa de alto nivel, la oligarquía dominante tiene asegurado esos puestos, si quieres dejar de ser paria solo puedes ser servil adlátere de segunda.

viernes, 2 de febrero de 2007

Derechos de autor, patentes, propiedad intelectual y derechos de pernada (una vuelta de tuerca más al estado farenggi)


El recientemente desaparecido doctor Watson (no el de Sherlock Holmes sino el compañero de Creeck) dirigió el proyecto “GENOMA” durante sus más gloriosos años, escribió que se indignaba porque determinadas empresas, por lo general de la rama farmacéutica, patentaban cada una de las secuencias que terminaban de descifrar y todo ello sin dar nada a cambio a los cientos de investigadores que antes habían abierto el camino a ese descubrimiento. La patente le daba a esa empresa derechos económicos sobre las aplicaciones que se obtuvieran en un futuro sobre esa secuencia. Una perfecta empresa farengi.

En aquellos momentos se desencadenó un gran debate e incluso se llegó a pedir que cambiaran las leyes para certificar patentes y los más progresistas condenaron la apropiación comercial con exclusividad de lo que sólo a la naturaleza pertenecía.

Desgraciadamente aquel momento pasó como hoja que lleva el viento y las grandes corporaciones mantuvieron sus privilegios. Pero llegó un escándalo que aún hoy colea. Las empresas farmacéuticas durante muchos años han “robado” muestras de plantas y animales y fórmulas tradicionales de países tercermundistas, sin declarar ni pagar nada a cambio. De esos productos obtenidos irregularmente extraían sus principios activos que patentaban. Después, algunos de esos principios terminaban convertidos en medicamentos a los que extraían un beneficio comercial brutal, dándose la circunstancia de obtener una homologación sanitaria en el país de origen que no se otorgaba a la cura tradicional. Lo peor del caso es que en ocasiones la medicina llegaba a diferir poco de la medicina tradicional.

Las empresas farmacéuticas trabajan con productos que, a menudo, son la diferencia entre la vida y la muerte, sin embargo, bajo ningún concepto permiten reducir su beneficio comercial. En África una enorme cantidad de gente pobre muere de SIDA, sus países, totalmente arruinados por las multinacionales y sus colateralidades, como consecuencia los enfermos mueren sin ninguna clase de tratamiento y la enfermedad se extiende como un incendio forestal. Se pidió a las empresas farmacéuticas condiciones especiales y fueron cicateros, no ayudaron a solucionar el problema, así que finalmente, algunos de esos países decidieron hacer genéricos para el tratamiento del SIDA. Hoy las empresas farmacéuticas están poniendo todos los palos a las ruedas de esos proyectos como pueden, incluidas amenazas políticas de algunos países dominados por las multinacionales como Estados Unidos. Lo paradójico es que esas mismas empresas deben millones de euros de sus beneficios a los productos que previamente extrajeron ilegalmente de esos países.

Cuando era pequeño me gustaban mucho las historias de piratas, en especial las del cine. Ver a Burt Lancaster saltando de tejado en tejado y manejando la espada era un deleite. En toda historia de piratas había piratas buenos y piratas malos. Los que, según el guión, robaban ricos galeones que venían de expoliar América y los que asesinaban por una pieza de oro y se vendían al mejor postor. Seguro que la realidad de la época original era antes la segunda que la primera y el bien siempre estaba rodeado de mal. Sin embargo, que niño no anhelaba ser un romántico pirata de los primeros.

Hoy el término pirata ha resurgido en los campos comerciales y en el mar de Internet. Hoy, como entonces, hay piratas románticos y piratas malvados, en cualquier caso su final es el mismo y aunque ahora no existe la horca, el pirata que transgrede las leyes que han impuesto los poderosos, es aniquilado. Hoy, como antaño, colgara virtualmente del palo mayor de la nave insignia o pactará con el gobernador de turno una multinacional, un nuevo Port Royal que le dará patente de corso y, tal vez, le hará jefe de su seguridad, si traiciona a suficientes excolegas.

Ayer los piratas usaban ágiles veleros fuertemente armados, hoy sus armas son un crackeador para los piratas de la copia y un troyano para el hacker que busca nuevos puertos donde fondear y si hay suerte arrastrar megas de información confidencial. De estos últimos, de los hackers, se han formado los sueños de los niños de hoy.

-¿Qué vas a ser de mayor?

-Yo quiero ser HACKER.

¿Qué hace tan atractivo a este pirata? ¿El anonimato? ¿La osadía y el riesgo? ¿El beneficio?... ¡No! Lo que le hace tan atractivo es su enemigo. Un enemigo al que todos toleramos porque no nos queda más remedio (o eso creemos). El hacker que soñamos es un luchador romántico que se introduce en las redes de las grandes corporaciones buscando datos sucios que las comprometan, es el que copia programas sobrevalorados y los crackea en las narices de SGAE y BSS, mientras estos lanzan sus piratas malos con patente de corso a romper conexiones y averiar PC’s que contienen copias ilegales.

Pero el cerco se estrecha y las sociedades de autores cobran un canon, una especie de impuesto revolucionario terrorista, por adquisición de cintas vírgenes, CD’s gravables y dicen que pronto por el papel en blanco y tal vez por las hojas de lechuga.

De tanto en tanto cae un pirata, si tiene aptitudes el mundo farengi le ofrecerá trabajo a cambio de eliminar condena, sino directamente a galeras; solo de tanto en tanto, con ayuda de algún astuto abogado, logra salvar los escollos y evita acabar entre rejas.

Mientras quede una mula descargando o un hacker navegando, el estado farengi no podrá extenderse impunemente sin temor.

Mientras quede un poema binario quedara esperanza en la red.

Todos lo sentimos en nuestra piel, no hacen falta ejemplos. Las grandes empresas, a expensas de los ciudadanos, se benefician de las leyes relacionadas con las patentes, derechos de autor y propiedad intelectual. Y cuando una de esas leyes, en cualquier país, deja cabos sueltos, no hay duda de que presionarán y presionarán hasta taponar la fuga.

Es curioso que se haya establecido un tribunal internacional para juzgar los crímenes contra la humanidad. Sin embargo, a nadie escapa que cuando hablamos de derecho internacional, siempre tiene razón el que tiene los “misiles más gordos” y tras él, sin lugar a dudas, se escudarán los miembros del estado farengi. Hoy por hoy, parece que EE.UU. tiene los misiles más poderosos, así que las multinacionales más importantes tienen sede en ese país, pero las que no la tienen también están, por lo general, con su política.

No es de extrañar que las leyes y normas internacionales que siempre tienen posibilidad de cumplimiento son las comerciales y no es un estamento jurídico quien encauza el debido cumplimiento sino la OMC. De este modo hablar de derecho internacional es hablar de reglamentación del estado farengi y claro, la estrella son los derechos de autor, de propiedad intelectual y de patentes. Con esto se dominan la cultura, la ciencia y la tecnología, es decir, el pensamiento humano. Así es como el estado farengi ha creado fundaciones de proyección internacional, pero de carácter privado para proteger, sobre todo, la propiedad intelectual. Curiosamente, estas asociaciones tienen atribuciones tales como hacer abordajes en el mar de Internet, es decir, introducirse en una red informática privada cual pirata informático, que lo son, y causar el daño que se les antoje con la excusa del uso de software ilegal.

¿Es qué ser pirata con patente de corso no es delito también?

No entiendo (es un decir) como los estados de derecho no tomen cartas en el asunto, seguro que hay hackers honrados dispuestos a colaborar con la causa de aniquilar a estos peligrosos corsarios. Sin embargo, los estados a un colaboran de buen grado con las BSS’s y las SGAE’s del mundo, y les dan una credibilidad que no merecen aceptando sin rechistar las propuestas y presiones, dándoles atribuciones que no les pertenecen y dejando de sancionar las más que posibles malas acciones de que alardean.

La propiedad intelectual se ha convertido en un caballo de batalla importante y es que si bien es justo que el creador de algo cobre por el uso de su creación, ya no lo es tanto cuando los maestros del marketing convierten ese algo en un standard pues entonces
Pasa a convertirse en un monopolio. Tampoco es justo que el necesario beneficio implique el desahucio para una parte de la humanidad… como ocurre con el elevado precio de algunos medicamentos insustituibles. Cuando los derechos de autor, de propiedad intelectual o de patentes, se convierten en un abuso, el pirateo, a su vez, pasa a ser la única opción razonable, ya que los legales poseedores de derechos pasan a ser el barco negrero que esclaviza a la humanidad.

Y ahora tomemos a Microsoft como ejemplo (ejemplo facilón). No es justo que cobre altos precios por sus programas si quiere que sean standares. La versión de Windows de turno está sobre los 120€ y aún se puede considerar accesible, pero con solo el sistema operativo no se trabaja y esta casa aún ha creado un nuevo Standard de ofimática: la suite Office que en su versión incompleta supera siempre los 300€. Se puede entender que el uso profesional de esos programas implique un fuerte precio, pero el uso personal no debería ser penalizado de esa manera. Ellos (las empresas de informática) han generado una gran necesidad, ya no se puede vivir sin ordenadores, pero a un tiempo han parcelado todo lo relacionado con ese mundo y se han decidido a cobrar altos dividendos por todo. Hoy en cualquier casa que se tenga un PC hay un mínimo de 600€ en diferentes programas adquiridos, otros 1000€ en programas promocionales o regalados, más shareware y freeware, y aún así seguro que habrá el equivalente a otros 3000€ de programas de dudosa legitimidad… ¿tanto software se usa?... la respuesta es no. Esos programas se usan una o dos veces y luego quedan aislados en el disco duro hasta que decidimos borrarlos para poner otros nuevos. Aún crees que un particular debe pagar 300€ por el Office… De todas formas como casi cada año Microsoft sacará este uno nuevo con nuevas facilidades y nuevas codificaciones que serán nuevo Standard y te obligara a actualizarte por otros 300€… ¡Jesús!


El estado farengi jamás hace ascos al dinero, pero jamás acepta su responsabilidad. Por ello, si no es capaz de controlarse, el estado farengi debe abolirse.

domingo, 21 de enero de 2007

Denuncia, lucha... muerte.


Allá donde las injusticias, las de verdad, se muestren, encontrareis mi denuncia. Allí donde los vampiros se han saciado en un festín, encontrareis mi protesta y allí, donde las calaveras se doran al sol, también oiréis mi protesta retumbando en las gargantas de mil soles. No esperéis pues que me calle, pues el silencio si me llamaría cobarde, como a vos.
Cuando se espera a que el horizonte mitigue la luz para poder abrazar la cruz gamada. Cuando las hienas en manada sonríen al olor de la sangre. Cuando los vampiros salen de sus ataúdes para sonreírle a los cuellos de los cisnes. Es cuando llega la hora en que las bestias se felicitan y se dan regalos, recuerdan su feliz pasado sobre las tripas del mundo.
Luché por la libertad cuando ya era libre, mas lo hice para que otros lo fueran como un día lo hicieron otros por mí.
No cierres tus ojos, a tus ventanas también llega el hedor. La muerte no sonríe jamás, ni siquiera al verdugo.
Crees que tu inocencia se fundamenta en su sufrimiento, pero el llanto de unos niños sin padre te dice que no. Qué delito le hizo digno de semejante condena, tal vez gritar muy alto que era un hombre. Como gritó la primera vez que le aplicaron aquellos sucios electrodos en los genitales.
En un ignoto campo de cadáveres, bajo una capa de cal viva, yacen los restos de muchos padres… de muchas madres… de muchos hijos. Y sólo el llanto del recuerdo, si la dura vida no los tumbó del camino, es la lápida que les queda.
Torturados por error, por el error de ser hombres, por el error de tener hambre, por el error de que exista la tortura, por el error de que un hombre se instaure como Dios.
Me imagino esos hombres, cual Segismundo en su prisión, clamando al cielo perverso por tan cruel Dios y repitiendo sus palabras… “¡Ay! Triste de mí… ¡Ay! Infelice. Apurar cielos pretendo ya que me tratáis así, qué delito cometí contra vosotros naciendo…” Pues la tortura no entiendo como no entiendo el por qué de mi fin.
Es duro pensar que en esta vida los hay que han nacido para justificar a los reyes, pero es más duro pensar que una cohorte de sanguijuelas disfrutaran de tu agonía y lo justificarán en sus barrigas llenas.
Revuélvete y lucha, pero con las armas de un hombre. Sólo sales al campo de batalla cuando crees la batalla ganada y sólo atacas a un hombre con el cuchillo por la espalda. Espero que no sea ese tu sueño de un mundo mejor, porque tus sueños son las pesadillas del mundo y tu Dios es un dios iracundo cuya voz es una orden… ni amor ni cielo, sólo el dolor de los que no fueron lo bastante… para ser sus siervos.
Si mi otoño ha de ser guerra, aquí me encontrareis. Puede que mi cuerpo caiga, más mi alma seguirá de pie. Y tenéis que saber que, aunque vaya a la tumba, mi dedo acusador os marcará hasta el final de los tiempos, hasta el apocalipsis y hasta la muerte de los falsos dioses en la hoguera de sus propias iras.

sábado, 20 de enero de 2007

Dibujar y escribir


Miro como un dibujante termina una caricatura a un muchacho alemán u holandés… es rubio.

Las noches de verano, en los pueblos de la costa, siempre son muy animadas. Puestecitos de toda índole, tapas, helados, combinados, refrescos, discotecas… La gente camina alborozada paseo arriba y paseo abajo y, en algún momento, todos terminan por parar, en un sitio u otro, para echar un vistazo a algo interesante.

Ahora me fijo en los trazos del caricaturista. No es fácil encontrar las características principales de una persona a la que no conoces y aún más si esta es joven y la vida no ha personalizado su cara.

Ya ha terminado y todos sonríen, pero en la mirada del artista veo que no está convencido de su obra. A los clientes no parece importarles, en el fondo se alegran de que su niño no esté en aquel papel y es un dibujo gracioso… se van contentos.

Pienso que escribir es algo parecido. Intentas ver esas cosas importantes que definen el todo, para, diciendo lo mínimo, decirlo todo. Las palabras son los trazos que describen la cara de la vida. Si acertamos nuestra mirada brilla al verse en ese espejo, pero si nos equivocamos siempre esperamos arrancar, como poco, una sonrisa.